La cumbre del G20 concluyó este miércoles con el compromiso asumido por los líderes de las 20 economías más desarrolladas de afrontar de manera conjunta la crisis alimentaria que afecta al orbe, además de alentar el diálogo como solución de las crisis.

En la declaración conjunta que puso fin al cónclave de dos días, celebrado en la ciudad indonesia de Bali, los dirigentes manifestaron que tomarán “medidas urgentes para salvar vidas, prevenir el hambre y la malnutrición», en especial en los países más vulnerables.

«Nos comprometemos con proteger a los más vulnerables frente al hambre utilizando todas las herramientas disponibles para gestionar la crisis alimentaria», destacó el comunicado final del encuentro.

Además, remarcaron que «la resolución pacífica de los conflictos, la gestión de las crisis, así como la diplomacia y el diálogo, son vitales».

Los participantes del evento que aglutina a las 20 economías más desarrolladas mencionaron que el conflicto en Ucrania ha agudizado las dificultades existentes de la economía global.

El texto apuntó que la mayoría de los países del G20 condena la operación militar especial de Rusia en Ucrania, pero mencionó que «hubo otros puntos de vista y diferentes evaluaciones de la situación y las sanciones».

La declaración final catalogó como “inaceptable” el uso o la amenaza de la utilización de armas nucleares.

Durante la última sesión plenaria, el anfitrión de la cita, el presidente de Indonesia, Joko Widodo, transfirió al primer ministro de India, Narendra Modi, la presidencia pro témpore del Grupo de los 20.

India asumirá de manera formal la presidencia del G20 a partir del 1 de diciembre próximo.