El biólogo ocoeño y expresidente de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, Milcíades Mejía, calificó de “indignante” la tala de más de 80 árboles en las cercanías del estadio de béisbol de Ocoa.

Mejía mostró las imágenes de las destrucciones que llevaron a cabo obreros del Ministerio de Deportes en esta provincia.

“Con sumo pesar les muestro las lamentables imágenes de destrucciones atroz que se esta realizando de la arboleda del entorno del play de béisbol de Ocoa. Señores es algo indignante ver como están tumbando más de 80 árboles con más de 12 m. de altura. Un pequeño pulmón de Ocoa que acaban de convertirlo en un erial. No entiendo y quisiera que me lo expliquen cuál es el plan, cuando el señor Presidente anuncia un plan de reforestación nacional, sus subalternos en Ocoa hacen todo lo contrario”, expresó.

“Me preocupa sobre manera la indiferencia de todas las organizaciones de mi pueblo que han callado ante este crimen ecológico. Piedad señor, piedad. Los ocoeños estamos desprotegidos, ampáranos antes de que caigamos en el precipicio”, expresó.

Ocoeños advierten graves daños

De su lado, Betty Pimentel, quien fue la primera persona que hizo la denuncia en las redes sociales, manifestó su indignación.

“Atención ambientalistas: Play de San José de Ocoa a pesar de nuestros reclamos queda devastado, más de 200 árboles fueron talados desde el viernes en la tarde , hasta horas de la noche de ayer sábado, dan muerte al pulmón de la Canadá, los funcionarios responsables no explicaron la acción”, dijo.

En tanto que el exdirector de Fondeprosjo, Rafael Read Velázquez, escribió: la Ley 64-00 es clara respecto a esos temas que usted conoce y maneja muy bien. Ahí se saltaron todos los protocolos exigidos por la Ley. Penosos que ahora quieran justificar lo injustificable. La provincia de SJO en estos tres años ha retrocedido en cobertura boscosa y protección de nuestros acuíferos y las jornadas de reforestacion están ausentes. Hasta la biodiversidad en los parques nacionales que inciden en nuestra geografía están amenazados. Penoso».