La Secretaría de Marina (Semar) de México ha comenzado la creación de nuevos arrecifes artificiales utilizando artefactos navales con el objetivo de proteger la vida marina.

Tras su hundimiento, estos servirán como hábitat para fauna y flora marina en varias ciudades del país. Según la Semar, 29 buques de la Armada de México se convertirán en la base de estos arrecifes, proporcionando espacios de reproducción para diversas especies como peces, caracoles, erizos y estrellas de mar.

Proteger la vida marina

Estos arrecifes no solo actuarán como hábitats marinos, sino que también funcionarán como barreras naturales contra huracanes y fomentarán el turismo sustentable.

Forman parte del programa “Creación de sistemas arrecifales artificiales”, al que se suman entidades como Sonora, Tamaulipas y Michoacán. Los buques, dados de baja en 2022, ayudan a conservar los ecosistemas marinos al reducir la presión sobre los arrecifes naturales expuestos a la sobreexplotación por buceo turístico.

Impulso al Turismo y la Investigación

Además de proteger la biodiversidad, estos arrecifes fomentarán el turismo sostenible y abrirán nuevos caminos para la investigación científica y el combate a la pesca ilegal. Se estima un ahorro económico significativo con este programa: más de 61 millones de pesos en Sonora, más de 41 millones de pesos en Michoacán y más de 123 millones de pesos en Tamaulipas.

Sistema Arrecifal Artificial Sonorense

El Gobierno de Sonora, a través de la Secretaría de Turismo (Sectur), presentó el Sistema Arrecifal Artificial Sonorense. El proyecto utilizará siete buques, tres aeronaves, un vehículo anfibio y tres piezas de artillería que se hundirán en una formación que asemeja un ancla, en honor a la Secretaría de Marina, para crear un ecosistema marino y fomentar el turismo en San Carlos.

Roberto Gradillas Pineda, secretario de Turismo de Sonora, destacó la colaboración con Rotary International, la Secretaría de Marina y la Secretaría del Medio Ambiente para este proyecto.

Amenazas a los Arrecifes Globales

Según el Instituto de Recursos Mundiales (WRI), el 60% de los arrecifes del mundo están amenazados por actividades como la sobrepesca, pesca destructiva, desarrollos costeros y la contaminación, poniendo en riesgo estos ecosistemas y los beneficios que ofrecen a millones de personas.