El medio ambiente se ha disparado en la percepción de los ciudadanos como uno de los principales problemas que existen actualmente en España. Según el barómetro de septiembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), la preocupación por el medio ambiente ocupa el quinto lugar en la lista de principales problemas, citada por el 14,6% de los ciudadanos, cuando en julio solo lo mencionaba el 2,7%.

De esta manera, el medio ambiente ha pasado de ser el problema número 22 en la lista al quinto en solo dos meses, y se sitúa inmediatamente por detrás de la preocupación por la sanidad y antes del gobierno y los partidos políticos. Ocurre tras un verano en el que se han vivido grandes incendios sin precedentes en las últimas décadas, con casi 300.000 hectáreas arrasadas, según las estimaciones del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS).

La encuesta del CIS se realizó entre el 1 y el 10 de septiembre. Hasta el 30 de agosto, en España se habían registrado 63 grandes incendios, y detrás de muchos de ellos se encuentran las olas de calor de este verano, las altas temperaturas y la escasez de lluvias.

Precisamente la sequía también ha sido protagonista de la información en los últimos meses. Las precipitaciones acumuladas este año son un 26% menos de lo habitual y los embalses que acumulan agua para el consumo humano se encuentran a su nivel mínimo desde 1995, con un nivel medio por debajo del 30%, y con cuencas como las del Guadalquivir (20,8%), el Guadiana (23,9%) y Guadalete-Barbate (24%) en una situación aún peor.

Ante la falta de precipitaciones, este verano se han vuelto a vivir cortes en el suministro de agua, incluso en lugares donde no es en absoluto frecuente, como en Galicia. Son problemas que se han vivido no solo en España: el verano de 2022 ha sido el más caluroso en Europa desde que hay registros. Tanto en nuestro país como en otros se ha vivido con preocupación el incremento de las muertes atribuidas al exceso de calor, que en España han triplicado la media de los últimos años.

De alguna forma, las restricciones impuestas por el ahorro energético y las consecuencias energéticas de la guerra de Ucrania también tienen su impacto sobre el medio ambiente, al aumentarse la apuesta por las fuentes de energía fósiles, incrementando así la emisión de gases contaminantes que contribuyen al calentamiento global.

La crisis económica sigue siendo el principal problema

En su habitual repaso a los problemas del país que más preocupan los españoles, el barómetro de septiembre del CIS muestra que la crisis económica sigue siendo el que ocupa el primer lugar, con un 39,7% de menciones, aunque ha caído casi 13 puntos desde julio.

Le siguen el paro, con un 30%, porcentaje similar al del sondeo anterior y los problemas políticos (18,6%), que vuelven a la tercera plaza que antes ocupaba la sanidad, una de los tres principales problemas de España a juicio del 17% de los encuestados.

Con el medio ambiente en el quinto lugar, los siguientes problemas más citados son la preocupación por el Gobierno y los partidos políticos (12,2%) y el mal comportamiento de los políticos (10%). La preocupación por la subida de las tarifas energéticas sube ligeramente, del 7 al 8,9%.

Por su parte, la preocupación por los peligros para la salud que supone la COVID-19 bajan considerablemente desde verano: de la sexta posición que ocupaba en julio con un 9,3% de menciones al 25º puesto en el que aparece en el último sondeo, mencionado por solo un 2,3% de ciudadanos.