Zoom Video Communications, la compañía estadounidense famosa por su sistema de llamadas y reuniones virtuales, ha anunciado este martes un despido de 1.300 empleados, lo que supone el 15% de su plantilla. Además, recortará el salario base para sus directivos un 20%, según ha dicho el presidente ejecutivo Eric Yuan. Con este anuncio, Zoom se suma a la ola de recortes de personal que están llevando a cabo las tecnológicas desde 2022.

El empresario ha asegurado que este año renunciará a su bono corporativo, lo que implica un recorte del 98% de su sueldo. En concreto, su salario base ascendió a 301.731 dólares el año pasado y renunciará a una bonificación corporativa para el año fiscal 2023. Su remuneración total para 2022 fue de 1,1 millones de dólares, según una declaración de mayo, recogida por Bloomberg.

La medida se toma como consecuencia de la caída en la demanda de servicios de videoconferencia de la compañía, tan en auge durante la pandemia. «Trabajamos incansablemente, pero también cometimos errores. No nos tomamos el tiempo que deberíamos tener para analizar a fondo a nuestros equipos o evaluar si estábamos creciendo de manera sostenible, hacia las prioridades más altas», ha señalado Yuan en un comunicado. Los empleados que se vayan recibirán 16 semanas de salario, cobertura de atención médica y la bonificación anual.

La compañía, que se convirtió en un nombre familiar durante la pandemia debido a las videoconferencia, ha visto cómo se ralentiza el crecimiento de su facturación. Los analistas calculan que los ingresos de Zoom aumentaron solo un 6,7% en el último año fiscal. Esto representa un gran frenazo respecto a 2021, cuando sus ingresos se multiplicaron por más de cuatro. Se estima además que las ganancias cayeron un 38% en 2022.

Las acciones subieron este martes hasta un 10% tras conocerse la noticia, hasta 84,87 dólares. Antes, el valor se había desplomado hasta en un 47% en los 12 meses transcurridos hasta el cierre del lunes.

Tras ganar millones de usuarios en plena de la pandemia, Zoom intenta ahora revertir la ralentización del crecimiento ampliando sus herramientas para empresas. A pesar de ello, los analistas prevén que las ventas sigan reduciéndose.

La tecnológica se une a las empresas estadounidenses que están controlando los costes para prepararse para una posible recesión. Las principales firmas estadounidenses del sector, incluidas Amazon, Twitter o PayPal, han anunciado la salida de miles de personas para superar la caída de la demanda provocada por la alta inflación y el aumento de las tasas de interés.