Yellen asegura que el Tesoro está dispuesto a respaldar a más bancos si lo necesitan
Las autoridades estadounidenses han emprendido una cruzada para defender la solidez de su sistema financiero tras la caída del Silicon Valley Bank y del Signature Bank en las últimas dos semanas. La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha asegurado este martes en una breve conferencia que “la situación se está estabilizando” y que la banca está sana. Al tiempo, sin embargo, ha mostrado su disposición a dar más apoyo a los bancos que lo necesiten.
Yellen ha indicado que “podría estar justificado” adoptar medidas adicionales de rescate si nuevas quiebras en entidades más pequeñas suponen un riesgo para la estabilidad financiera. Ante una audiencia de banqueros, la secretaria del Tesoro ha dicho que la situación es muy diferente a la de 2008, pero que el Gobierno federal está preparado para actuar con contundencia.
“Permítanme ser clara: las recientes actuaciones del Gobierno han demostrado nuestro firme compromiso de tomar las medidas necesarias para garantizar que los ahorros de los depositantes y el sistema bancario sigan siendo seguros”, declaró.
En una intervención ante la Asociación de Banqueros Americanos, Yellen se ha referido a la decisión del Tesoro, el fondo de garantía de depósitos y la Reserva Federal de otorgar garantía federal a todos los depósitos de Silicon Valley Bank y de Signature Bank, por encima de los 250.000 dólares por cliente que contemplaba la regulación. “Nuestra intervención fue necesaria para proteger el sistema bancario de Estados Unidos en general. Y acciones similares podrían estar justificadas si entidades más pequeñas sufren retiradas masivas de depósitos con riesgo de contagio”, ha dicho.
En las preguntas posteriores a la intervención ha insistido en la disposición de las autoridades a actuar: “El público debe tener confianza en nuestro sistema bancario, y nuestra intención es permanecer vigilantes en los próximos días y semanas. Y como he dicho en mi intervención, eso significa intervenir potencialmente si las entidades experimentan el tipo de dificultades que hemos visto que plantean riesgo de contagio”. Una de las opciones que ha estado sobre la mesa es ampliar de forma generalizada, aunque con carácter temporal, la garantía de depósitos por encima de los 250.000 dólares.
Yellen ha subrayado su apoyo a los bancos comunitarios, pequeñas y medianas entidades que llegan allí donde no lo hacen los grandes. La situación de inestabilidad financiera favorece sobre todo a las grandes entidades, que han recibido el flujo de depósitos que ha salido de las pequeñas y medianas, según fuentes del mercado. Suelen ser ganadores de este tipo de crisis. “Los grandes bancos juegan un papel importante en nuestra economía, pero también lo hacen los bancos pequeños y medianos”, ha dicho Yellen, que ha subrayado que aumentan la competencia en el sector y que con frecuencia tienen un conocimiento más cercano y especializado de las áreas donde operan.
First Republic se recupera
Con las palabras de Yellen, la cotización del First Republic Bank, otra entidad que se percibe en peligro, se ha disparado. La entidad con sede en San Francisco recibió la semana pasada una inyección de 30.000 millones de dólares en depósitos por 11 de los mayores bancos estadounidenses en un intento de evitar su quiebra. JP Morgan, que lideró esa operación, está analizando nuevas medidas para reforzar al banco, incluida la posibilidad de una ampliación de capital en la que participen de nuevo los grandes bancos, lo que también ha impulsado a la entidad en Bolsa.
Yellen también ha hablado de la ventana de liquidez que ha puesto en marcha la Reserva Federal. Con ambas medidas, según la secretaria del Tesoro, “la situación se está estabilizando y el sistema bancario estadounidense sigue siendo sólido”. En particular, ha afirmado que “las salidas de depósitos agregados de los bancos regionales se han estabilizado”.
En la intervención inicial y en las preguntas posteriores, Yellen ha apuntado que es momento de “reexaminar los actuales regímenes de regulación y supervisión y considerar si son adecuados para el riesgo al que se enfrentan hoy los bancos”. Se ha referido a la investigación al respecto que ha abierto la Reserva Federal para aclararlo. El Departamento de Justicia y la Comisión de Valores y Bolsa (la SEC) han puesto en marcha investigaciones sobre el colapso del Silicon Valley Bank, y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha pedido al Congreso que refuerce las normas sobre los bancos regionales e imponga sanciones más duras a los ejecutivos de los bancos en quiebra.
El Silicon Valley Bank, con sede en Santa Clara (California) quebró el 10 de marzo después de que los depositantes se apresuraran a retirar dinero en medio de la ansiedad por la salud financiera del banco. Fue la segunda mayor quiebra bancaria de la historia de Estados Unidos. Los reguladores se reunieron el fin de semana siguiente y anunciaron que el Signature Bank, con sede en Nueva York, también había quebrado.
Yellen compareció ante el Comité de Finanzas del Senado la semana pasada y aseguró a los depositantes e inversores que el sistema bancario estadounidense “sigue siendo sólido” y que los estadounidenses “pueden confiar” en la seguridad de sus depósitos. Esta semana comparecerá dos veces más ante grupos de congresistas, en el Senado y en la Cámara de Representantes.