Trabajadores dominicanos, castigados por la falta de indexación impositiva salarial
En la República Dominicana, la relación entre los trabajadores y la tributación es un tema que merece una atención urgente. A medida que los salarios de los trabajadores aumentan gradualmente con el tiempo o permanece la base exenta inalterada en el tiempo, la falta de indexación impositiva salarial se ha convertido en un castigo silencioso que erosiona el poder adquisitivo de la población laboral.
La indexación, en términos simples, significa ajustar automáticamente la base impositiva de los salarios de acuerdo con la inflación. Esto evita que los trabajadores caigan en tramos impositivos más altos debido a aumentos salariales que, en realidad, no representan un aumento real en su poder adquisitivo. En otras palabras, la indexación mantiene el equilibrio entre la carga impositiva y los ingresos de los trabajadores.
Pero de igual manera, indexar la base exenta de impuesto a los salarios permite aquellos trabajadores que no han recibido aumentos salariales poder amortiguar una proporción de la pérdida del poder adquisitivo de sus salarios debido a la inflación.
Un beneficio fundamental de la indexación es la preservación del poder adquisitivo. Cuando los salarios no se ajustan automáticamente con la inflación, los trabajadores pueden verse obligados a pagar impuestos más altos sobre ingresos que en realidad no les brindan un mayor nivel de vida. Esto crea una carga desproporcionada sobre los contribuyentes y puede contribuir a la desigualdad económica.
Además, la indexación promueve la transparencia fiscal. Al eliminar la distorsión causada por la falta de ajuste con la inflación, se logra una tributación más justa y comprensible para todos los contribuyentes. La predictibilidad y la equidad son pilares esenciales de un sistema fiscal sólido.
Esta situación desafía la equidad, la justicia fiscal y los discursos de muchos políticos. No es posible estar aprobando exenciones fiscales a yates, naves aéreas, hoteles, zonas francas, entre otros renglones de la economía, y a la vez justificar estas mismas exenciones para no indexar la base impositiva salarial de los trabajadores dominicanos.
Los trabajadores dominicanos, al NO RECIBIR aumentos salariales para mantener su calidad de vida, deberían ser alentados y no castigados por su esfuerzo. La falta de indexación impositiva los somete a una carga tributaria cada vez mayor, sin que su estándar de vida mejore realmente.
Para tener una idea del castigo que se les aplica a los trabajadores dominicanos, la escala de renta gravable se mantiene vigente desde el año 2017, sin ajuste por inflación, una renta hasta RD$416,220.00 no paga impuestos y supone un sueldo mensual exento del Impuesto Sobre la Renta de RD$34,685.00.
Si se hubiera aplicado la indexación por inflación desde el 2017 a la fecha de hoy, el sueldo mensual exento de impuesto sería un monto de RD$46,804.00, es decir, una base de renta no gravable de RD$561,648.00, con lo que le permitiría a la clase trabajadora dominicana mitigar una proporción de la pérdida del poder adquisitivo producto de la inflación acumulada en estos últimos seis años.
Conforme a las informaciones estadísticas publicadas en la página web del Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) en nuestro país a junio del 2023, se registra un total de 2,389,766 trabajadores dominicanos, de los cuales 1,684,079 son empleados privados (70.47%), y 705,687 empleados públicos (29.53%).
Del total de los trabajadores dominicanos registrados en el sector formal, el 78% perciben un salario mensual menor a los 30 mil pesos dominicanos, y sólo un 22% de los trabajadores reciben renta por encima de los 30 mil pesos, que serían justo la cantidad de empleados que vienen siendo castigados por la falta de indexación de la base impositiva. Es decir, un total de 525,748 dominicanos y dominicanas, que pertenecen a la clase media, que es la que está más sofocada de impuestos. Será este segmento social el que deberá ponderar las ofertas electorales que les hacen los políticos con miras al año 2024.
De acuerdo con un estudio realizado por especialistas impositivos, la indexación salarial representaría un sacrificio fiscal para el gobierno dominicano de RD$15,800.00 millones sólo para el año 2023, por lo que ni soñar que sea ponderada esta indexación por parte del Congreso de la República en la Ley de Presupuesto Nacional del año 2024.
Finalmente, desde esta columna Tu Consultorio Financiero, consideramos que, la falta de indexación impositiva salarial en la República Dominicana está castigando a los trabajadores de manera injusta. Es hora de considerar seriamente la puesta en práctica de políticas fiscales que incluyan la indexación como un paso esencial hacia una sociedad más justa y equitativa. Garantizar que los trabajadores no sean penalizados por buscar una mejora en su calidad de vida es fundamental para el bienestar económico y social del país.