El tipo de cambio: Un predictor sutil de los resultados electorales presidenciales

15-01-2024
Economía y empleos
Acento, República Dominicana
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En el complejo panorama político actual, diversas variables influyen en el destino de una nación. Entre estas, el tipo de cambio emerge como un indicador económico que puede arrojar luz sobre los resultados de las elecciones presidenciales. Aunque no se puede considerar como un único factor determinante, su influencia y conexión con la percepción pública pueden ser subestimada.

El tipo de cambio refleja la relación entre dos monedas y es un termómetro sensible de la salud económica de un país. En el contexto de las elecciones presidenciales, puede desempeñar un papel significativo al impactar directa e indirectamente en la percepción de los votantes.

Las fluctuaciones en el tipo de cambio afectan directamente la vida diaria de los ciudadanos. Una moneda más fuerte puede traducirse en precios más bajos de importaciones, mientras que una moneda más débil puede aumentar el costo de vida. Estos factores económicos tienen el potencial de influir en la aprobación o desaprobación de un gobierno incumbente.

Desde su nivel más bajo cuando el 28 de abril del 2023 la tasa de cambio oficial para la venta conforme a las estadísticas del Banco Central, alcanzó un valor de RD$ 54.66 pesos x dólar, y hoy día 15 de enero del 2024, la misma tasa oficial es de RD$ 58.93%, sin embargo, en el mercado extra bancario es de RD$ 59.30 pesos x un dólar americano, es decir, una depreciación acumulada de un 8.49%, y si es con la tasa oficial del Órgano Rector de la política monetaria es 7.81%, lo cual significa que estadísticamente, en los últimos ocho meses, el tipo de cambio se ha ido depreciación a razón de 1% mensual.

Otros economistas pudieran decir que la depreciación del tipo de cambio ha sido de apenas un 4%, si se compara el valor de la tasa oficial de diciembre a 2022 a diciembre 2023, pero para los fines de este análisis, lo que se analiza es lo que ha pasado en los últimos ocho meses.

En un análisis estadísticamente significativo con un nivel de confianza de un 97.5%, los resultados muestran que cuando la depreciación del tipo de cambio supera el 12% en los últimos doce meses, los candidatos presidenciales del gobierno en turno, no ganan las elecciones, por lo que a los estrategas de políticas deberán enfocarse en como minimizar el impacto de esta variable en la percepción de los electores a la hora de elegir el candidato presidencial que más le convenga a la República Dominicana.

Estos resultados estadísticos muestran que los votantes a menudo vinculan la estabilidad económica con la competencia de los candidatos. Un tipo de cambio estable puede ser interpretado como un indicador de fortaleza económica y competencia política. Por el contrario, una volatilidad excesiva puede generar desconfianza y afectar negativamente la imagen de los líderes en el poder.

Las decisiones relacionadas con el tipo de cambio a menudo están vinculadas a la política monetaria del gobierno. La habilidad de un líder para mantener una política económica coherente y efectiva puede ser un factor crucial para la toma de decisiones de los votantes.

La manera en que un líder maneja las cuestiones relacionadas con el tipo de cambio puede influir en la percepción general de su liderazgo. La habilidad para gestionar eficazmente las variables económicas complejas puede generar confianza en el liderazgo, mientras que las fallas pueden ser percibidas como incompetencia.

Es esencial destacar que el tipo de cambio no es un predictor infalible de los resultados electorales. Factores como la situación social, política y las plataformas de los candidatos también desempeñan un papel crucial. Además, la comprensión del tipo de cambio a menudo es limitada entre los votantes, lo que puede disminuir su impacto directo.

Otros factores que serán decisivos en los resultados electorales presidenciales son el desempeño económico, la inflación acumulada de los últimos 36 meses vista como pérdida del poder adquisitivo de la población, la deuda pública creciente, la distribución desigual del crecimiento económico, la mala gestión de algunos funcionarios, los bajos salarios de los empleados públicos y privados, el desempleo juvenil, los incumplimientos de promesas económicas.

En conclusión, aunque el tipo de cambio no debe considerarse como el único predictor de los resultados electorales, su relevancia como indicador económico no debe pasarse por alto. Los líderes políticos deben reconocer la conexión entre las decisiones económicas, la estabilidad financiera y la percepción pública. En un mundo cada vez más interconectado, comprender el papel del tipo de cambio puede brindar valiosas perspectivas sobre los resultados de las elecciones presidenciales y la dirección futura de un país.

Conforme al entorno externo y a las condiciones internas de la economía, el gobierno actual tiene más luces que sombras en materia económica y debe enfocarse en que la población perciba los logros obtenidos, mientras que la oposición deberá enforcarse en los puntos débiles a nivel económico.