El síndrome de comparar los indicadores económicos de República Dominicana con otros países
El complejo de comparación entre países se conoce como «síndrome de inferioridad nacional». Este término se utiliza para describir la tendencia de un país a compararse constantemente con otros en términos de logros económicos, cargas y tarifas impositivas, costos salariales, costos de la canasta alimentaria, costo de energía eléctrica, pobreza monetaria, indicadores sociales o culturales, entre otros.
La comparación de indicadores entre países se ha hecho una práctica común en nuestro país. Sin embargo, es fundamental abordar esta tarea con precaución y sensatez. En el caso de la República Dominicana, es incorrecto comparar algunos de los indicadores señalados con otros países latinoamericanos de manera indiscriminada.
La República Dominicana es una nación única en muchos aspectos, y sus indicadores económicos reflejan esta singularidad. Algunas de las razones que respaldan esta afirmación incluyen:
Primero. Diversidad Económica: La economía dominicana es altamente diversificada, con un enfoque significativo en el turismo, la agricultura, las zonas francas y las remesas. Esta diversidad hace que las comparaciones con países que tienen estructuras económicas diferentes sean inapropiadas.
Segundo. Dependencia del Turismo: El turismo es uno de los pilares de la economía dominicana. Las fluctuaciones en esta industria pueden tener un impacto desproporcionado en los indicadores económicos, lo que hace que las comparaciones con países que no dependen tanto del turismo sean inexactas.
Tercero. Políticas Económicas: Las políticas económicas implementadas por el gobierno dominicano también son factores determinantes en sus indicadores. Estas políticas pueden diferir de las de otros países latinoamericanos, lo que dificulta las comparaciones directas.
Cuarto. Inversiones Extranjeras: La República Dominicana ha atraído inversiones extranjeras significativas en los últimos años. Estas inversiones pueden distorsionar los indicadores económicos y no reflejar necesariamente el bienestar de la población.
Es importante recordar que cada país tiene sus propias características económicas, sociales y políticas que influyen en sus indicadores.
En lugar de comparaciones indiscriminadas, es más útil analizar los indicadores económicos de la República Dominicana en el contexto de su propia historia y circunstancias únicas. Esto permite una comprensión más precisa de su situación económica y una toma de decisiones más informada por parte de los responsables de la formulación de políticas.
Comparar los indicadores económicos de la República Dominicana con otros países latinoamericanos, sin un análisis cuidadoso y contextualizado, es incorrecto y puede llevar a conclusiones erróneas. Es fundamental considerar las particularidades del país y las dinámicas que influyen en sus indicadores para comprender su situación económica de manera precisa y objetiva.