El rol de los bancos ante una posible crisis alimentaria
El Gobierno Dominicano a través del Ministerio de Agricultura ha asegurado que no habrá escasez de alimentos en nuestro país. Sin embargo, diversos organismos internacionales han advertido desde hace meses que el mundo podría sufrir serios problemas de alimentación a consecuencia del cambio climático, las dificultades en las cadenas de suministros para la producción de alimentos y el aumento vertiginoso de los precios de los insumos y energía, que se han visto agravado por la incertidumbre derivada de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Las últimas previsiones de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) en su informe del mes de junio 2022, Biannual Report on Global Food Markets, señalan un endurecimiento de los mercados de alimentos que amenazan con provocar problemas de alimentación en al menos 14 millones de personas en Latinoamérica.
De tal situación, los bancos dominicanos pudieran jugar un rol muy relevante, en el rediseño de sus estrategias para financiar al sector agropecuario, con esquemas diferenciados de financiamiento hacia la producción para consumo interno y para la exportación.
Dicho monto apenas representa el 1.7% del total de la cartera de crédito del sistema financiero, inferior al 1.9% que representaba al mes de abril de 2021. Es decir, que cada vez más, el sector agrícola tiene menor financiamiento del sistema bancario formal.
Al mes de abril del 2022, las informaciones analizadas revelan en cuanto a la cantidad de crédito otorgados al sector agrícola, de un total de 38,873, seis entidades bancarias otorgan el 93.7%, liderando la lista ADEMI con un 25.1%, seguido por BANFONDESA (22.7%), ADOPEM (18.1%), POPULAR (13.3%), BHDLEON (7.5%), y en el sexto lugar el BANRESERVAS (7.1%).
En términos de montos en millones de pesos otorgados, el análisis muestra que el Banco Popular Dominicano mantiene su liderazgo en el financiamiento al sector agrícola con una participación de un 31.5%, seguido por el BHDLEON con un 25.0%, el BANCO DE RESERVAS con un 19.0%.
Con participaciones menores en cuanto a montos en millones de pesos ADEMI (4.7%), SCOTIABANK (4.7%), SANTA CRUZ (2.3%), BANFONDESA (2.3%), ADOPEM (1.4%).
De dicho análisis se deriva la oportunidad que tienen todas las entidades bancarias y el rol que deberían jugar en fomentar un mayor financiamiento al sector agrícola y a los productores rurales, a tasas de interés razonables, en aras de garantizar la sostenibilidad de la actividad agropecuaria y la seguridad alimentaria en la República Dominicana.
De igual manera, el Estado Dominicano y la Autoridad Monetaria y Financiera deberían realizar de manera proactiva, una revisión panorámica a las condiciones de financiamiento al sector agrícola, desde la revisión de las normas establecidas en el Reglamento de Evaluación de Activos; las políticas de estímulos para fomentar el acceso al crédito con programas de financiamientos especiales y tasas de interés atractivas. Igualmente, hacer análisis de los obstáculos que limitan el acceso al crédito a los productores rurales, entre otros aspectos, que posteriormente permitan a las entidades bancarias realizar una adecuada gestión de riesgos, aumentar su presencia y financiamiento a dicho sector.