El euro se desplazó aún más por debajo de la paridad con el dólar el lunes, alcanzando su nivel más bajo desde 2002, el año en que entró en circulación física, a medida que aumentaban los temores de recesión.

La preocupación de que una interrupción de tres días en el suministro de gas europeo a finales de este mes exacerbará una crisis energética pesa sobre la moneda del bloque continental, mientras que el yuan de China cayó a su nivel más bajo en casi dos años después de que el banco central redujera las tasas de interés clave.

El índice del dólar, que mide el dólar frente a una cesta de pares, alcanzó nuevos máximos de cinco semanas cuando los funcionarios de la Reserva Federal reiteraron una postura agresiva de ajuste monetario antes del simposio Jackson Hole de la Fed esta semana.

El corte del gas ruso

Fue el euro el que llevó la peor parte de la presión de venta frente al dólar después de que Rusia anunciara el viernes por la noche una suspensión de tres días del suministro de gas europeo a través del gasoducto Nord Stream 1 a finales de este mes.

La moneda cayó a un mínimo de USD 0,99945, su nivel más bajo desde mediados de julio, y bajó un 0,4% por última vez en el día.

“El valor razonable del euro se ha visto dañado por el shock energético, lo que significa que el euro/dólar no es especialmente barato incluso en estos niveles”, dijo Chris Turner, jefe global de mercados de ING.

El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, dijo al periódico alemán Rheinischen Post que es “probable” que la economía alemana, una de las más expuestas a interrupciones en el suministro de gas ruso, sufra una recesión durante el invierno si la crisis energética continúa profundizándose.

El índice del dólar estadounidense, que mide la moneda frente a seis rivales, incluido el euro, subió a 108,47, su nivel más alto desde el 15 de julio.

Ganó un 2,33% la semana pasada, su mejor repunte semanal desde abril de 2020, en medio de un coro de formuladores de políticas de la Fed que enfatizan que se debe hacer más para controlar la inflación alta de décadas.

El último fue el presidente de la Fed de Richmond, Thomas Barkin, el viernes, diciendo que el “impulso” entre los banqueros centrales era hacia aumentos de tasas más rápidos y anticipados.

Los mercados monetarios actualmente indican un 46,5 % de probabilidades de otro aumento enorme de la tasa de 75 puntos básicos en la próxima reunión de la Fed el 21 de septiembre.

Los economistas en una encuesta de Reuters se inclinan hacia un aumento de 50 puntos básicos con los riesgos de recesión en aumento.

Los rendimientos del Tesoro estadounidense a 10 años de referencia subieron brevemente por encima del 3% el lunes por primera vez desde el 21 de julio.

A medida que los rendimientos bajaron de sus máximos, el dólar cayó frente al yen y bajó un poco en el día a 136,81. Más temprano, el dólar alcanzó sus niveles más fuertes frente al yen desde el 27 de julio.

Mientras tanto, la libra esterlina cayó a un nuevo mínimo de cinco semanas de 1,17875 dólares.

El dólar también subió hasta 6,8420 yuanes en las transacciones internas por primera vez desde septiembre de 2020, después de que el Banco Popular de China redujera las tasas preferenciales de los préstamos a uno y cinco años, como se esperaba ampliamente. Eso se produjo después de que relajó otros puntos de referencia clave de préstamos en un movimiento sorpresa la semana pasada.

Frente al yuan extraterritorial, el dólar llegó a 6,8621, también el más fuerte desde septiembre de 2020.

El dólar australiano vinculado a las materias primas ganó un 0,2 % a 0,6885 dólares, recuperándose después de una caída a 0,68595 dólares el viernes por primera vez desde el 19 de julio, ya que el mineral de hierro de Dalian repuntó más del 2 % y el cobre también subió. El kiwi avanzó un 0,3% a $0,6190.