El BCE sube los tipos de interés 25 puntos básicos, hasta colocar el precio del dinero en el 4,5%
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido subir sus tipos de interés un cuarto de punto porcentual, hasta situar el precio del dinero en el 4,5%, su tasa más alta en más de 20 años. Con este nuevo movimiento al alza, el décimo consecutivo, el eurobanco pretende doblegar la inflación de la zona de euro y alcanzar su objetivo de reducirla al 2%, a pesar de que esta subida puede frenar el crecimiento económico de la UE.
También ha subido en 25 puntos básicos la facilidad de crédito, a la que presta a los bancos a un día, hasta el 4,75%, y la facilidad de depósito, a la que remunera el exceso de reservas a un día, hasta el 4%.
El supervisor señala en un comunicado que la nueva subida de tipos “refleja la valoración del Consejo de Gobierno de las perspectivas de inflación a la luz de los nuevos datos económicos y financieros, la dinámica de la inflación subyacente y la fortaleza de la transmisión de la política monetaria” y que la escalada puede haber tocado techo.
La nueva remontada de tipos se produce después de que la inflación de la eurozona bajara en julio dos décimas, hasta alcanzar el 5,3%, su nivel más bajo desde enero de 2022. Nivel con el que también cerró agosto.
A juicio de Juan José Fernández-Figares, director del departamento de Análisis de Links Securities, tras esta nueva subida “los tipos de interés van a permanecer altos por más tiempo del que probablemente descuentan la mayoría de los inversores”.
Previsiones
El Consejo de Gobierno prevé que la inflación media de 2023 alcance el 5,6%, y que baje hasta el 3,2% y el 2,1% en 2024 y 2025, respectivamente. Lo que supone una revisión al alza de dos décimas para este año y el siguiente, debido al precio de la energía, y la rebaja de una décima para 2025.
Respecto a la inflación subyacente, que excluye el precio de la energía y los alimentos, prevé que baje ligeramente hasta el 5,1% este año, el 2,9% en 2024 y el 2,2% en 2025.
En relación al producto interior bruto (PIB) de la eurozona, pronostica que suba este año un 0,7%, un 1% el que viene, y un 1,5% en 2025. Estas previsiones suponen una corrección a la baja de dos décimas en 2023, medio punto en 2024 y una décima en 2025. El supervisor atribuye estos descensos a la política monetaria restrictiva sobre la demanda doméstica y al debilitamiento del comercio internacional.