El Banco de Inglaterra baja los tipos de interés al 5% en su primer recorte en más de cuatro años
El Banco de Inglaterra (BoE) ha cumplido con las expectativas de buena parte de inversores y analistas: ha bajado los tipos de interés 25 puntos básicos (o un cuarto de punto), del 5,25% al 5%. Se trata del primer recorte del precio del dinero en Reino Unido desde marzo de 2020, es decir, desde el comienzo de la crisis del covid hace más de cuatro años. La decisión ha sido tomada por la mínima dentro del Comité de Política Monetaria (MPC, por sus siglas en inglés) del banco central británico.
«Cuatro miembros prefirieron mantener el tipo de interés en el 5,25%», recoge el comunicado del MPC de este jueves. Por tanto, de los nueve miembros que componen el organismo, cinco han votado a favor de la reducción de tipos y cuatro en contra. Una clara división dentro del BoE que ya era más que evidente antes de la reunión: «No está clara la decisión (…), ya que la votación será muy ajustada», advirtieron a primera hora de esta mañana los analistas de Link Securities en su informe diario de mercados.
No obstante, el consenso de mercado esperaba que la institución monetaria británica anunciara la reducción. Hasta ahora, el precio del dinero en Reino Unido se encontraba en su nivel más alto en 16 años, el 5,25%. Se situaba en ese nivel desde agosto de 2023. Fue entonces cuando el Banco de Inglaterra terminó su etapa de fuertes subidas de los tipos de interés, para hacer frente a la desbocada subida de los precios (inflación).
El BoE comenzó a encarecer el dinero en diciembre de 2021, antes que los demás grandes bancos centrales, a excepción del de Japón (que ayer mismo subió los tipos al 0,25%). A modo de ejemplo: el Banco Central Europeo (BCE) no comenzó a elevar los tipos hasta julio de 2022.
En Reino Unido los tipos de interés se situaron en el 0,1%, mínimo histórico, en marzo de 2020 con la intención de flexibilizar al máximo la política monetaria ante la histórica crisis que supuso la pandemia del coronavirus.
¿Por qué el BoE baja los tipos?
En su nota de este jueves, el Comité de Política Monetaria británico recuerda que su objetivo es situar la tasa de inflación en Reino Unido en el 2%, «y de forma que contribuya a sostener el crecimiento [económico] y el empleo». Una meta que también comparten el banco central de Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed), y el BCE.
El índice de precios al consumo, o IPC, fue precisamente del 2% interanual tanto en junio como en mayo (últimos datos disponibles). Sin embargo, en el sexto mes del año los expertos habían esperado que el IPC de Reino Unido se redujera una décima. De hecho, este fue el motivo que arguyó Rishi Sunak, ex primer ministro del Reino Unido, para convocar elecciones anticipadas en el país. Estas se celebraron el 4 de julio pasado y su resultado arrojó una derrota histórica para el partido del anterior premier.
El BoE ha pronosticado este jueves que el IPC subirá «hasta alrededor del 2,75% en el segundo semestre de este año, a medida que los descensos de los precios de la energía del año pasado desaparezcan de la comparación anual». Ello hará que se revele «más claramente la persistencia de las presiones inflacionistas internas», ha explicado.
Dentro del IPC (que se conoce también como cesta de la compra), el BoE ha mostrado desde hace tiempo una especial preocupación por el aumento de los precios de los servicios. En este sentido, el comunicado del MPC mencionada que la inflación de los servicios se haya suavizado al 5,7% en junio y mayo pasados. «Es probable que este factor haya sido la principal consideración para los que votaron en contra de un recorte» este jueves, dice en un comentario Andrew Jones, gestor de cartera de Janus Henderson.
Asimismo, ha resaltado : «El crecimiento de los salarios semanales medios en el sector privado ha caído al 5,6% en los tres meses anteriores a mayo».
¿Qué pasará en la próxima reunión del BoE?
Con todo, el Banco de Inglaterra ha asegurado que «conviene reducir ligeramente el grado de restricción de la política económica» y, por ello, ha bajado los tipos de interés. «El impacto de los anteriores choques externos ha remitido y se han registrado algunos avances en la moderación de los riesgos de persistencia de la inflación. Aunque el PIB ha sido más fuerte de lo esperado, la orientación restrictiva de la política monetaria sigue pesando sobre la actividad de la economía real, lo que se traduce en un mercado laboral más laxo y frena las presiones inflacionistas», ha agregado.
De cara al futuro, el BoE ha afirmado que la política monetaria «deberá seguir siendo restrictiva durante el tiempo suficiente» para llevar la inflación británica al 2% de forma sostenible. «El Comité sigue vigilando de cerca los riesgos de persistencia de la inflación y decidirá en cada reunión el grado adecuado de restricción de la política monetaria», ha dicho, evitando así anticipar qué hará en su próxima cita del 19 de septiembre.
«Sigue siendo probable que los tipos de interés sigan bajando a partir de ahora», considera Jones. En cambio, el gobernador del BoE, Andrew Bailey, ha optado por la cautela declarando: «Tenemos que tener cuidado de no bajar los tipos demasiado rápido ni demasiado«.
Las palabras de Bailey pueden «ser un intento de evitar dar la impresión de que el Comité de Política Monetaria va a recortar los tipos rápidamente», considera Ruth Gregory, economista de Capital Economics. A su parecer, la entidad central quiere ver más pruebas de la disminución de las presiones inflacionistas antes de embarcarse en nuevas bajadas en los tipos de interés.
Esta experta anticipa que el Banco de Inglaterra reducirá el precio del dinero al 4,50% a finales de este año y al 3,00% el que viene. Para cumplirse su pronóstico de cara a 2024 el BoE tendrá que hacer dos movimientos a la baja adicionales de 25 puntos básicos cada uno (o uno solo de medio punto).
Por el contrario, desde el Departamento de Análisis de Bankinter rechazan que haya más recortes en lo que resta de año: «La inflación repuntará ligeramente y estimamos que el BoE querrá asegurarse que tanto los salarios como la inflación de servicios evolucionan favorablemente. Ambos se sitúan por encima del 5%».