El Gobierno de Portugal quiere inmortalizar la voz de la cantante de fado más internacional de ese país, Amalia Rodrigues, conocida también como «la dama del fado», quien fuera responsable de internacionalizar este género musical y exhibirlo en numerosos idiomas.

El Ministerio de Cultura de Portugal presentará una candidatura a la UNESCO para que su voz y su música sean declaradas «Memoria del Mundo». 

Esta iniciativa surge a propósito del vigésimo segundo aniversario de la muerte de la cantante y el objetivo es que las grabaciones que se conservan de la fadista, algunas inéditas, sean elevadas a la categoría de Memoria del Mundo, tal como ya ocurrió con la colección de discos del argentino Carlos Gardel.