El pasado viernes, 20 de septiembre, China rebosó de alegría el Teatro Nacional Eduardo Brito.

Ese día, la Embajada de esa nación en República Dominicana celebró  el 75º Aniversario de la fundación de la República Popular China.

La conmemoración obsequió a todos los asistentes una brillante presentación artística iniciada con un concierto de la Orquesta de Cámara de la Orquesta Sinfónica Nacional de China que regaló expresiones musicales de  diferentes regiones del gigante asiático.

A seguidas un  extraordinario festín audiovisual discurrió con espectáculos maravillosos de diferentes grupos de la Asociación de Amistad de Ultramar de la provincia china de Sichuan.

El acto estuvo encabezado por el embajador de la República Popular China, Chen Luning, y su esposa Wang Heming.

“Hace 75 años, el Partido Comunista de China (PCCh) lideró al pueblo en la larga lucha que culminó en 1949 con la fundación de la República Popular China, país en que el pueblo es el dueño de su propio destino”, expresó en el discurso de apertura el embajador Chen Luning.

A partir de ese histórico año de 1949, “bajo la firme y sólida dirección del Partido Comunista, la nación china ha dado el salto histórico de la puesta en pie, ha logrado alcanzar una modesta prosperidad y una naciente fortaleza, y está marchando hacia su gran revitalización a zancadas imparables”, expresó el embajador.

Chen Luning destacó que “en el primer semestre de 2024, la economía china registró una expansión interanual de 5%, lo que la convierte en un motor decisivo del crecimiento económico mundial”.

«Con el desarrollo de las nuevas fuerzas productivas de calidad que hemos priorizado a todo esfuerzo, los productos con la marca “Hecho en China” evolucionan hacia la industria inteligente, verde y de alta gama», expresó.

El diplomático resaltó el espíritu de la recién celebrada Tercera Sesión Plenaria del XX Comité Central del PCCh, conferencia importante que estableció explícitamente que China mantendrá inquebrantablemente su decisión para una mayor profundización integral de la reforma y la ampliación de la apertura al exterior.

“Una comunidad de futuro compartido de la humanidad”

«Sea en el pasado, en el presente o en el futuro, China ha sido, es y será una fuente de propulsión estable para el crecimiento económico mundial, un inmenso y dinámico mercado para que todos los países ensanchen sus oportunidades de negocio, así como un firme y decidido activista en la construcción conjunta de una comunidad de futuro compartido de la humanidad», recalcó.

En cuanto a las relaciones entre China y República Dominicana, el embajador subrayó que, desde hace seis años, cuando el lazo diplomático se estableció, han registrado un desarrollo vigoroso, generando progresos palpables en favor de ambos pueblos.

Chen Luning sostuvo que República Dominicana ya es el mayor socio comercial de China en la región caribeña y, a su vez, China se perfila como el segundo país socio de la República Dominicana en temas de comercio.

«En los primeros siete meses del año en curso, el volumen comercial entre China y la República Dominicana alcanzó los 3 mil millones de dólares y se prevé que superará los 5 mil millones para todo el año», afirmó.

El diplomático chino manifestó que, como ambos países se encuentran en fase crucial de reformas, China está dispuesta a compartir oportunidades novedosas de reforma y desarrollo como un buen compañero en la expedición hacia la modernización, con miras a elaborar un porvenir más prometedor y feliz a nuestros pueblos.

«Mis mejores votos por la prosperidad de nuestra Gran Patria, por el desarrollo floreciente de las relaciones chino-dominicanas, y por la felicidad y buena salud de todos ustedes», proclamó el embajador ante un público de más de 1,500 personas, que acompañó a los ministros Franklin García Fermín, de Educación Superior, Ciencia y Tecnología; Miguel Mejía, para Políticas de Integración Regional; senadores, diputados, viceministros, alcaldes, dirigentes de partidos políticos, miembros del cuerpo diplomático y organismos internacionales, representantes de la colonia china, empresarios chinos y locales, así como maestros y estudiantes del Instituto Confucio.