La Fiscalía General de la Federación de Rusia ha solicitado este viernes ante un tribunal reconocer a la corporación Meta, propietaria de Facebook e Instagram, como una organización extremista.

El organismo señala que, en relación con la operación militar especial llevada a cabo por las Fuerzas Armadas rusas con el fin de brindar protección a las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, «en la red social Instagram se difunden materiales informativos que contienen llamamientos para cometer actos violentos (asesinatos) contra ciudadanos de la Federación de Rusia, incluido el personal militar, así como se publica sistemáticamente información que contiene llamamientos a la participación de ciudadanos en el territorio de la Federación de Rusia en disturbios masivos acompañados de violencia».

Frente a los hechos, la Fiscalía General rusa pidió al Servicio Federal para la Supervisión de Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Medios de Comunicación de Rusia (Roskomnadzor) restringir el acceso a dicha plataforma.

En paralelo, «conforme con la ley federal ‘Sobre la oposición contra la actividad extremista'», el organismo «dirigió una solicitud ante un tribunal sobre el reconocimiento de Meta Platforms Inc. como una organización extremista y la prohibición de sus actividades en el territorio de la Federación de Rusia».

¿Qué pasó?

Meta decidió cambiar sus reglas en cuanto a lenguaje de odio si está dirigido contra las tropas rusas que participan en combates en Ucrania, confirmó el portavoz de la compañía, Andy Stone, citado por The Washington Post.

«Como resultado de la invasión rusa de Ucrania, hemos permitido temporalmente formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas, con un discurso violento como ‘muerte a los invasores rusos'», señaló el vocero. «Todavía no permitiremos llamados creíbles a la violencia contra los civiles rusos», resaltó.