Diversidad de corales, octocorales y esponjas en los arrecifes del Parque Nacional Jaragua, República Dominicana

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El Parque Nacional Jaragua está ubicado en un área remota a la costa suroeste de la República Dominicana. La pesca y la minería son las principales actividades humanas. Las principales formaciones arrecifales del Parque incluyen: (a) arrecifes de banco largo (espolón y surco) que crecen como bandas sobre la plataforma y corren en dirección SW-NW a 12-25 m de profundidad, (b) arrecifes bien desarrollados, profundos, bordeantes arrecifes en el borde de la plataforma (áreas de bajada) que podrían extenderse de 10 a 45 m de profundidad, y (c) parches de arrecifes pequeños y comunidades de coral-octocoral-esponja-algas poco desarrolladas en plataformas poco profundas cerca de la costa, fondos rocosos y sobre las paredes sumergidas del arrecife levantado.

Se muestrearon nueve localidades de arrecifes entre Cabo Beata y Bahía Honda usando buceo para inventariar la diversidad y abundancia relativa de corales escleractinios, octocorales y esponjas. Se estudiaron los arrecifes periféricos comenzando en el fondo (30 m) y nadando en un patrón en zig-zag (50 m a cada lado) hacia áreas menos profundas. Los arrecifes de los bancos fueron examinados nadando en zig-zag a lo largo de 500 m a lo largo de la formación de surcos en espolón.

Las esponjas fueron el grupo más diverso con 83 especies en 50 géneros, seguidas por los corales escleractinios con 56 especies en 26 géneros y los octocorales con 47 especies en 15 géneros. Los nuevos registros incluyeron 8 especies de coral, 29 especies de octocorales y 59 esponjas. La diversidad, composición de especies y abundancia de grupos particulares varió entre las diferentes localidades. Los arrecifes del norte dentro del parque y la isla de Los Frailes en alta mar tuvieron la mayor cobertura viva, abundancia relativa y diversidad para los tres grupos.

En general, el Parque Nacional Jaragua tuvo la mayor diversidad de corales, octocorales y esponjas reportada para la República Dominicana y se encuentra entre las más altas reportadas para el norte del Caribe. Se recomienda que el área sea protegida y que las actividades pesqueras sean reguladas o eliminadas por completo.

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