Carlos Duarte, eminencia de la oceanografía: «La mayor amenaza es pensar que los océanos no tienen solución»

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Del aire al mar. Si en el episodio anterior estudiábamos la composición de la atmósfera terrestre, en esta ocasión El cazador de cerebros celebra el día mundial de los océanos. Y lo hacemos sumergiéndonos en las aguas del Mar Rojo para aprender más sobre esta fuente de recursos energéticos, de sustancias químicas y biológicas y, sobre todo, de conocimiento científico.

Después de varios años siguiéndole la pista, conseguimos entrevistar en Arabia Saudí a Carlos Duarte, ecólogo marino y profesor distinguido de la cátedra Tarek Ahmed Juffali de Ecología del Mar Rojo, KAUST. Autor de un millar de artículos científicos en revistas internacionales, Duarte ha navegado por todos los océanos y sus investigaciones han servido desde la industria alimentaria hasta la biomedicina. Además, dirigió la primera expedición española al Ártico, Malaspina, ha dado la vuelta al mundo evaluando el estado de los océanos y ha descubierto los ecosistemas de carbono azul: praderas oceánicas, marismas y manglares con capacidad de absorber el dióxido de carbono y almacenarlo en el subsuelo.

Ahora centra sus investigaciones en el Mar Rojo, el más joven y cálido del mundo, cuyas condiciones permiten utilizarlo como modelo para estudiar la respuesta de los océanos al calentamiento global. De hecho, Duarte y su equipo tienen un enfoque optimista para el futuro, ya que han observado que hay organismos capaces de adaptarse a las altas temperaturas, incluso a ciertos aspectos de la contaminación.

‘El cazador de cerebros’ entrevista a Carlos Duarte, eminencia de los océanos. Foto: RTVE

Una mirada optimista hacia el futuro

En la visita a Carlos Duarte y su equipo, descubrimos un concepto que puede ser fundamental en el futuro, la agricultura acuática. Y es que los cultivos de algas, por sus características y sus propiedades, podrían ofrecer respuesta a muchos de nuestros problemas: aliviaría la hambruna, contribuiría a la producción de biocombustibles y al desarrollo de polímeros sintéticos, y permitiría una actividad económica regenerativa para el medio ambiente.

También el estudio de los arrecifes de coral anima a mirar al futuro con optimismo. Los conocimientos adquiridos sobre el océano son aplicables a la ciencia biomédica, ya que nuestro organismo tiene interiorizada la química del océano debido a que las primeras formas de vida salieron del agua. Además, están desarrollando un prototipo de corales en factoría que pretenden introducir en los desarrollos turísticos de la zona, de modo que formen parte del paisaje y que involucren a los visitantes.

Y en eso centra ahora sus esfuerzos Carlos Duarte, en mejorar la comunicación con la sociedad para una concienciación más efectiva respecto al medioambiente: “En los últimos 10 años ha resurgido la vida en el océano y está en nuestras manos recuperar la abundancia de vida para 2050”. Por eso, Duarte apuesta por no centrar solo el foco en la parte negativa, sino en los grandes avances logrados a través de las políticas de conservación: “La mayor amenaza es pensar que los océanos no tienen solución y que nos dediquemos a otra cosa”.

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