En una decisión histórica, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), máximo tribunal en la materia del continente, ordenó ayer al Estado salvadoreño garantizar “de manera urgente” la interrupción del embarazo que reclama Beatriz, la joven madre de un niño de un año que hace más de un mes y medio pide un aborto terapéutico, porque padece lupus eritematoso sistémico agravado con insuficiencia renal y artritis reumatoidea y le diagnosticaron que la gestación pone en grave riesgo su vida. Se trata además de un embarazo de un feto anencefálico (sin cerebro), que no tiene posibilidades de sobrevida.